Te voy a regalar...

Te voy a regalar una cajita donde puedas guardar pequeños momentos de tu vida en los que fuiste realmente feliz para que cuando creas que ya nada puede ir peor, recuerdes que en algún momento de tu vida llegaste a tocar la cima con la punta de los dedos, y que si lo hiciste una vez, ¿por qué no lo haces otra?




En el momento en el que lo que nos rodea se convierte en importante, todo esto se convierte en un juego. Cualquier lugar es el escondite perfecto para los besos, cualquier excusa es idónea para rozarnos. Y aquello que está prohibido se convierte en adictivo según se va haciendo peligroso.